Hoy me he despertado saludando al nuevo día. Cuando uno llega a cierta edad (popularmente “a viejo“) reflexiona con más frecuencia sobre el final de la vida.
Los personas somos como los vinos: la edad estropea los malos. pero mejora los buenos. Dicen que envejecer con sabiduría, no es envejecer. Yo quisiera tener esa sabiduría y con ella alegrar mi entorno.
28 de noviembre de 1934, que día tan inolvidable y qué alegría para aquellos que me vieron nacer.
¿Hasta dónde llegaré? ¿Cuánto me quedará para terminar la carrera que comencé hace 75 años?
“No sabemos ni el día ni la hora”
Los personas somos como los vinos: la edad estropea los malos. pero mejora los buenos. Dicen que envejecer con sabiduría, no es envejecer. Yo quisiera tener esa sabiduría y con ella alegrar mi entorno.
28 de noviembre de 1934, que día tan inolvidable y qué alegría para aquellos que me vieron nacer.
¿Hasta dónde llegaré? ¿Cuánto me quedará para terminar la carrera que comencé hace 75 años?
“No sabemos ni el día ni la hora”